domingo, 3 de junio de 2012

Magglio Ordóñez: una carrera, infinitas alegrías

La carrera del jardinero Magglio Ordóñez ha sido, indudablemente, una de las más sobresalientes para venezolano alguno en el mejor beisbol del mundo. Mucho más de los batazos y logros, el patrullero siempre se encargó de poner la bandera nacional en lo más alto de cada uno de los parques en los que jugó. Esa gloriosa trayectoria de 15 años, llegará a su fin este domingo.

Ordóñez, de 38 años de edad, pasó los primeros meses de 2012 a la espera de una llamada telefónica de uno de los gerentes generales de las 30 novenas de Grandes Ligas y aunque sus números vitalicios inspirarían a cualquier organización a ofrecerle un contrato, dicha llamada nunca llegó.

Las lesiones son, posiblemente, la única cosa que Magglio removería de su ilustre carrera si tuviese la oportunidad. Mismas lesiones que impidieron que las miradas de varios ejecutivos se centraran en el criollo.

Sin embargo y aún cuando el fin del camino haya llegado más temprano de lo que el guardabosque pudo pensar, nadie podrá robarle el derecho a salir a la calle y decir: “Tuve una de las mejores carreras para pelotero alguno en mi época”.

Siempre ha sido reconocido por su torrido bateo
Es por eso, que hoy les presentamos algunos de los mejores momentos en la carrera de quien este domingo, pasará a ser un nuevo inmortal de la pelota nacional.

• Para Magglio, todo comenzó un 29 de agosto de 1997, cuando los Chicago White Sox le brindaron la oportunidad de saltar a un campo de las mayores por primera vez en su carrera.

A pesar de ver acción en apenas 21 juegos esa temporada, los síntomas de que alguien importante había llegado para quedarse, no necesitaron mucho más para aparecer en la llamada “Ciudad de los Vientos”. Magglio culminó su primera pasantía en las mayores con promedio de .319, con 11 remolcadas y 4 batazos de vuelta entera.

Se convirtió en estrella con los White Sox
• Luego de jugar sus primeras 8 temporadas en las mayores con los patiblancos, con quienes se consagró como figura, Ordóñez firmó un contrato con los Detroit Tigers por 5 años y 85 millones de dólares el 7 de febrero de 2005. Dicho contrato significó el segundo más grande pagado por los bengalíes en su historia al momento.

Su llegada a Detroit significó un nuevo comienzo
• El 14 de octubre de 2006, es, sin lugar dudas, una de las fechas mejor recordadas por el falconiano y todos sus seguidores.

Con dos outs en la pizarra y cuenta de 1-0 en el noveno inning del cuarto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, Ordóñez conectó un cuadrangular de 3 carreras ante el cerrador de los Oakland Athletics, Huston Street, para dejarlos en el terreno y completar la barrida de los Tigers, que avanzarían a su primera Serie Mundial desde 1984.

El vuelacercas del criollo, fue apenas el octavo conectado en la historia de las Grandes Ligas para culminar una serie de postemporada.

Fue, posiblemente, el batazo más significativo en su carrera
• El año 2007, no solo significó el mejor año en la carrera de Ordóñez, sino uno de los mejores en la historia de cualquier jugador de los Tigers. Para ser un poco más exactos, fue el segundo mejor año para un jugador de la franquicia desde 1961, cuando Norm Cash bateó para .361, con 41 cuadrangulares y 132 carreras impulsadas.

En esa gloriosa campaña, el venezolano resultó campeón de bateo de la Liga Americana con un impresionante promedio de .363, el cual también lideró el viejo circuito. Además, sus 54 dobles conectados también fueron una cifra tope en las mayores ese año y la mayor cantidad para un jugador bengalí desde los 56 de George Kell en 1950.

Por si fuera poco, sus 139 rayitas producidas esa zafra, fueron la mayor cantidad en la organización desde que Rocky Colavito impulsó 140 en 1961.

• El 29 de abril de 2010, ante los envíos del derecho Carl Pavano de los Minnesota Twins, el jardinero alcanzaría la cifra mágica de 2000 imparables en las mayores, convirtiéndose en apenas el sexto pelotero nacido en nuestro país en llegar a dicha cantidad, siendo Luis Aparicio, David Concepción, Omar Vizquel, Andrés Galarraga y Bob Abreu los anteriores.

Además, Magglio se transformó en el jugador número 260 en la historia de las Grandes Ligas con al menos 2000 hits.

Su trayectoria ha sido de las mejores para cualquier atleta criollo
El impresionante legado dejado por Ordóñez a lo largo de sus 15 campañas en las mayores, el cual también incluye 6 invitaciones al Juego de Estrellas (1999, 2000, 2001, 2003, 2006 y 2007) y 3 Slugger de Plata (2000, 2002 y 2007), pasará a la historia como uno de los más impactantes para atleta alguno en Venezuela. Un legado que pasó candado el 27 de septiembre de 2011, cuando el criollo apareció por última vez en un terreno de juego y tendrá su cierre con broche de oro este domingo, cuando reciba un merecido homenaje en el Comerica Park de Detroit, su casa por los últimos 7 años.